Instrucciones para tener un mapache como mascota:

1      Averigua si es legal tener mapaches en tu ciudad o estado. 

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   Encuentra un veterinario local que atienda mapaches. Aunque sean comunes en la naturaleza, son mascotas exóticas. Puede ser difícil encontrar a un veterinario que los atienda, asegúrate de encontrar uno antes de obtener un mapache.
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   Pasa la mayor cantidad de tiempo posible con el animal desde pequeño. Los mapaches no son totalmente domesticables, por lo que deben acostumbrarse al contacto humano.
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   Críalo solo. Aunque de pequeños los mapaches pueden llevarse bien entre ellos, los adultos son muy solitarios.
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   Dale al animal su propio espacio, con su cama y sus juguetes. Los mapaches pueden ser muy destructivos. Dándoles su propio espacio y sus propios juguetes para que muerda y arañe puede ayudar a minimizar el daño en tus cosas.
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   Entrena a tu mapache. Los mapaches pueden ser ligeramente entrenados y pueden aprender algunas órdenes.
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   Sé persistente. Cada vez que tu mapache muerda o rasguñe algo que no debe, dile "no" claramente, sácalo y dale uno de sus juguetes.
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   Alimenta a tu mapache con una dieta variada. Ellos aman las frutas y verduras frescas, tanto como las aves y los pescados.
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   Dale abundante agua. A los mapaches les gusta limpiar su comida antes de comerla.
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   Prepárate para la etapa de apareamiento. Los mapaches cautivos se ponen de mal humor y agresivos durante esta época y suelen "marcar su territorio" alrededor de la casa.

Reproducción

Los mapaches procrean durante febrero y abril con periodo de gestación de nueve semanas. El promedio de las crías es de dos a seis. Las crías nacen en los árboles huecos, troncos u otros areas protegidas. Las crías viven con la hembra hasta el otoño y y posiblemente durante el invierno.

Donde habitan y su comportamiento

Es un animal de bosque, especialmente cerca de ríos, aunque ha aprendido a vivir también en áreas habitadas. En su hábitat natural come de todo, desde ranas hasta frutos, pero en las ciudades y suburbios echa mano de los contenedores de basura para comerse los restos de alimentos arrojados en ellos. Los mapaches son nocturnos, tienen un agudo sentido del olfato y son buenos trepadores.

Comparados con la mayoría de los mamíferos carnívoros, son muy diestros con sus zarpas delanteras, que utilizan para agarrar y sostener la comida. El mapache es llamado a veces oso lavador por el hábito de manipular el alimento, por ejemplo desollando las ranas, en la orilla del agua, lo cual hace parecer que las lava. Esta acción es realizada por el mapache debido a que ciertas clases de ranas inflan su cuerpo y segregan un veneno a través de su piel para no ser ingeridas, lo cual el mapache elimina al "lavar" sus alimentos antes de comerlos. 

El mapache como mascota

El mapache de cachorro es un animal dulce y encantador pero cuando crece y se hace adulto puede llegar a morder y a ser destructivo con su entorno. En Estados Unidos, la mayoría de la gente que compra un mapache se deshace de el en cuánto llega a la edad adulta, bien soltándolo en el bosque o entregándolo a las autoridades de vida salvaje o a centros especiales de acogida que se dedican a ellos. El soltar un mapache en el bosque, sí ha sido criado por el hombre significa una muerte segura para el mismo, ya que no tendrá desarrollada ninguna habilidad para la supervivencia en estado salvaje, además de que no tendría miedo a los seres humanos y eso sería desastroso para el; por no olvidar el destrozo de ecosistema que podría llegar a hacer.

Distribución de sus hábitat natural

Los mapaches los encontramos en América del Norte y América Central, les encanta vivir en los bosques, pero también viven en las ciudades.

Enfermedades

Los mapaches son animales bastante agresivos que pueden transferir enfermedades a las personas mediante una mordida, al arañar o incluso por contacto indirecto. Debido que no es raro encontrarse con estos animales peludos alrededor de nuestros hogares, especialmente en las noches cuando buscan comida entre la basura, es importante estar pendientes de su presencia y usar precauciones comunes al manejar materiales que hayan tocado o dejado.

Virus de la rabia

La enfermedad más común que la gente adquiere de los mapaches, es la rabia. Este virus infecta el sistema nervioso central y puede provocar fiebre, alucinaciones y ataques. Si un mapache porta la rabia, el virus estará presente en su saliva, así que los mapaches contagiados pueden transmitir la enfermedad a través de mordeduras o rasguños, pues es probable que sus garras hayan estado en contacto con sus bocas. Mantenerse lejos de los mapaches salvajes es buena idea, pero es especialmente prudente si su comportamiento es agresivo o errático. Existen muy pocos casos de rabia adquirida por contacto con mapaches que hayan resultado en una muerte humana.

Salmonela

La bactería de la salmonela se encuentra en las heces de los mapaches y los humanos pueden contraerla como resultado del contacto con sus deposiciones y luego ingerir los microorganismos al transferirlos inadvertidamente de las manos a la boca. Esta particular bacteria puede permanecer inactiva en un ambiente seco durante períodos extendidos y activarse en condiciones favorables. El envenenamiento por salmonela puede provocar fiebre, dolor abdominal y diarrea severa. Puede ser particularmente poderosa en niños, ancianos y personas con problemas de inmunodeficiencia.

Ascáride

Los mapaches pueden excretar un gran número de huevos de ascáride a través de sus heces. Estos huevos son ligeros y pueden viajar por el aire, lo que potencialmente puede provocar que causen infecciones debido a la inhalación. La ingestión incidental también puede causar infecciones. Los parásitos ascáride pueden provocar serias enfermedades en los humanos pues afectan el sistema nervioso central y pueden dañar los órganos del cuerpo, incluyendo el cerebro. Las infecciones más severas relacionadas con los ascárides pueden resultar en perdida de la visión en incluso coma.

Leptospirosis

La bacteria leptospira provoca la enfermedad leptospirosis, que infecta a las humanos y a otros animales, incluyendo a los mapaches. Estos excretan este microorganismo particular a través de la orina; por ello, la gente puede infectarse al beber agua contaminada con estas bacterias. Los casos ligeros de leptospirosis provocan fiebres altas, dolor corporal, vómitos y diarrea. Los casos más serios provocan anemia, meningitis y falla hepática.

Ve este vídeo para más información sobre los mapaches...

Alimentación

Los mapaches son animales omnívoros, es decir, que comen de todo. Pueden alimentarse de ranas, sapos, cangrejos, semillas, frutas, y por supuesto, todo tipo de desperdicios de comida para seres humanos.

Cuando van de cacería, localizan a sus presas en aguas no muy profundas, o en la tierra. Una vez que el mapache tiene a su presa, la revisará y la olfateará, y si su nariz lo aprueba, se la comerá.

Los mapaches al igual que otros animales silvestres, no dependen del hombre para sobrevivir. Si se le da de comer a un mapache, va a interferir en sus hábitos de vida, y además se va a ganar un inquilino permanente.

Sabias que...?

• Una de las características más relevadoras de los mapaches son sus extraordinarias patas. Pueden rotar las traseras en un ángulo de 180 grados para ayudarse a trepar a los árboles. Además, tiene zarpas fuertes que se dividen en 5 dedos con los cuales agarrar distintos objetos.

• Los mapaches tienen sonidos complejos que se llaman vocalizaciones. Se han definido más de 50 tipos de ellas, entre las que se encuentran: gruñidos, susurros, alaridos y silbidos. Cada uno tiene una función en su comunicación con otros mapaches.

Características

El mapache es pequeño, poco mayor y más grueso que un gato, de pelo medianamente largo y de color gris plateado, más oscuro en centro del lomo. El pelo de las extremidades del mapache son casi blancas, la cola del mapache es larga y anillada (gris plateado con blanco o casi blanco), y una característica mancha de pelo negro que va desde cada mejilla a cada ojo, lo que es casi exclusivo de este género (sólo compartido con el panda gigante y algunos tipos de hurón) y lo hace muy reconocible, pues parece como si llevaran un antifaz. En ocasiones se sientan sobre sus cuartos traseros (muslos y glúteos), como lo hace el oso.